Namasté y bienvenidos a este espacio de comunidad en donde te voy a compartir herramientas prácticas para tu bienestar personal. Todos experimentamos momentos de cansancio extremo. Nuestro rol como padres puede resultar abrumador. Las madres que están criando niños pequeños, y que al mismo tiempo tienen trabajos demandantes; los padres que a veces tienen mas de 1 trabajo para poder cubrir las necesidades de la familia. El estilo de vida moderno nos demanda mucho. Nos sentimos agotados, y -mas seguido de lo que quisiéramos- explotamos, somos reactivos, nos enojamos (cono quiénes tenemos cerca), y después nos sentimos tremendamente culpables. Cuando la vida “no coopera” nuestro sistema nervioso está diseñado para reaccionar. Es un mecanismo de defensa, es común que las emociones difíciles surjan en estos momentos de saturación, cuando sentimos que la vida nos rebasa. Me encanta la frase de Ram Dass: “Si sientes que estas iluminado, pasa 1 semana con tu familia”, porque nos deja muy claro el reto tan grande de mantenernos en nuestro centro en estas situaciones. Casi siempre es la familia la que recibe estas reacciones impulsivas que no dejan ver nuestra mejor versión. No solo pasar tiempo con los hijos o tenemos varios días de convivencia familiar nos llevan a este extremo; cualquier situación que se te presenta como un reto, o incluso nuestra propia mente nos puede llevar a sufrir mucho. Hoy mas que nunca nuestro mundo cambia tan rápido que nuestros cuerpos y sistema nervioso no puede seguir ese ritmo. Se crea un sentimiento de inseguridad. Cuando sube la ansiedad, hay terreno para depresión. Exploraremos algo muy importante para el camino espiritual. ¿Cómo navegamos por las emociones difíciles, por aquellas emociones que me aprietan el botón y que se repiten con frecuencia? - Ansiedad, miedo, vergüenza. ¿Cómo uso esto para transformarlo en enseñanza y para avanzar en mi camino espiritual? ¿Cómo experimento esta lluvia de emociones? Dentro de mí se generan pensamientos, positivos y negativos, y los que alimente mas son los que van a regir mi estado de ánimo. Revisemos a Steven Joseph. No hay lobo malo. Lo que pasa es que nos dominan las emociones mas primitivas. A veces predominan las emociones mas evolucionadas, pero tenemos que alimentarlas. Una alternativa es cultivar intencionalmente las emociones mas plenas. La meditación es una excelente práctica para manejar el movimiento emocional. Te recomiendo prácticas que desarrollen generosidad, amor y compasión. Cuando traemos atención a las emociones difíciles y las empapamos de compasión, vamos suavizando y aligerando la carga. Importante: Todas las emociones vienen del mismo lugar, son energía de vida que buscan protegernos y promover la vida. Nos mueven en formas que nos protegen, que nos nutren. Por ejemplo: - Miedo y enojo nos proteger del peligro y las amenazas. - Vergüenza nos protege de sentirnos rechazados. - Culpa, nos ayuda a mejorar. - Avaricia trata de promover que podamos satisfacer nuestras necesidades. Cuando tenemos necesidades emocionales, estos sentimientos se intensifican. Son necesarios para sobrevivir y sobresalir; todas son expresiones de la vida amando a la vida. Podemos pensar que las emociones hacen a la vida complicada, enredada y causan sufrimiento, pero todo con el fin último de causar amor. Las emociones son la energía poderosa que ama la vida y la quiere proteger. Pero es muy difícil PAUSAR y pensar en eso en el momento en el que me enfrento a una emoción difícil, por eso exploto. Recordar y apreciar y SENTIR a mi propio ser engrandecido, me permite ver que la emoción es una corriente que se mueve a través de mí. PRACTICA
Siente tu cuerpo, respira, percibe. Experimenta esa corriente de ansiedad, de miedo… siente que esta energía es vida protegiendo a la vida. Está tratando de ayudarte. Hasta podrías decir GRACIAS. Verlo y experimentarlo así, cambia tu relación con el miedo y la ansiedad. ¿Por qué se siente tan mal entonces experimentar las emociones? Porque cuando llegan, se apoderan de ti…. y el sentido de quien eres es poseído por la emoción y nos hacemos chiquitos. Nos quedamos atorados y no fluye la energía, como cuando se atora la manguera. La emoción puede ser una experiencia sana que me esta dando información, pero cuando se apodera de mi, entonces los pensamientos empiezan a dar vueltas y se hace un remolino que se atora en nuestro cuerpo y todo el sentido de quién soy es este ser pequeño e indefenso. Cuando una manguera no tiene nudos. El agua fluye. La energía emocional nos informa en una manera inteligente y se convierte en la energía que enaltece nuestra vida. La práctica me permite transformar de una energía “hecha nudo” a una energía que fluye y que nutre. “La cura para el sufrimiento esta en el sufrimiento” - RUMY Transformamos cuando aprendemos a nutrir al monstruo emoción con atención sabia, con compasión. Siendo conscientes el veneno se convierte en la medicina. Recuerda: SOLO SI LO SIENTES, LO SANAS. ¡Hasta la próxima! Instagram: @alequinterooria Texto: Alejandra Quintero Imágenes: F.P. Derechos Reservados 2024
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