Podría considerarse a Cristóbal de Villalpanado como la definición dada por el estudioso Francisco de la Maza quien lo calificó “¡Variedad ejecutiva! Ni mas ni menos, eso es Villalpando”. Cristóbal de Villalpando, natural de la Ciudad de México, capital del gran Virreinato Novohispano, ciudad centro de grandes pintores tanto naturales como extranjeros que encontraban en esta creciente bulliciosa ciudad, un demandante mercado, que se satisfacería con la enorme producción artística que se volcó en grandes retablos de innumerables iglesias que con sus altares rebosantes de oro, Palacios y Universidades todas ellas en un barroquismo plástico, que al día de hoy todavía a pesar de las enormes vicisitudes políticas y revolucionarias persisten y existen como un orgullo de nuestro enormemente productivo artístico y creador gran país. Así los pintores, al igual que en todos los otros países del mundo, se constituían en cofradías, donde el cófrade mayor podía aceptar muy seleccionadamente a sus pupilos a formar parte de sus talleres y de donde salían posteriormente los grandes maestros de pintura los cuales constituirían otras, donde esas muy cerradas cofradías fueron in crescendo por matrimonio o por una enorme calidad pictórica del cófrade y así formarían parte de estos grupos donde veremos que no es la excepción nuestro Cristóbal de Villalpando quien se casó en 1669 con María de Mendoza, hija del pintor Diego de Mendoza. Cristóbal llegó a ser en 1686 veedor de arte de pintura. En fin, hablar de Cristóbal de Villalpando es tocar las investigaciones de todos los estudiosos que hayan estudiado el arte Virreinal, afirmando todos ellos que su obra es excelsa. El libro de Francisco de la Maza sobre Villalpando en el cuál basé mi artículo sobre La Plaza Mayor de México, con la quema del Palacio virreinal, (Lee el artículo aquí), realizado por la turba de 1695, la cual reclamaba por la falta de lluvia al trigésimo Virrey Don Gaspar de la Cerda y Sandoval Silva y Mendoza, octavo conde de Galva, acto que sucedió durante un Eclipse, donde en una gran pintura, misma que es la mejor descripción de la vida en la ciudad de México durante la segunda mitad del Siglo XVII hecha por nuestro artista Villalpando, aquí tratado. El extrañado estudioso y amigo Jorge Alberto Manrique quien estudio ampliamente la obra de Villalpando como fueron Toussaint, Diez Barroso, Villa, Carrillo, Gabriel, Revilla, Tovar y de Teresa, Angulo, Soria, Couto. Al haber descubierto esta pintura la cual aparece en una venta pública en un apartado estado de la Unión Americana, donde no solo he encontrado obra de José Juárez, de Ibarra, Cabrera, etc, lo cual nos indica que en las Leyes de desamortización, Revoluciones y revueltas que nuestra querida patria ha sufrido, también lo hizo con una terrible destrucción de nuestro enorme patrimonio heredado de la grandeza mexicana novohispana ciudades de palacios. Universidades de calidad mundial, acueductos con los cuales se precavía mitigar próximas sequías. En fin, un gran país hecho, forjado y creado por nosotros los mexicanos novohispanos, del cual debemos de sentirnos orgullosos, y con ello volver a escribir una historia que sea creativa, con orgullo y siguiendo la realidad de los hechos. Aquí viene esta explicación de esta maravillosa obra la cual afortunadamente formará parte de un Museo en México, mismo que nos dará orgullo, de mexicanos para mexicanos, forjemos un mejor País. Génesis 32:24-32 PDT: Jacob es tercer patriarca que Yahvé nombra cuando en la zarza ardiente le dice a Moisés que él es el Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Fue a él quien Isaac le dio la bendición de la primogenitura y no a su hermano mayor Esaú, lo cual nos indica que Jacob fue elegido por Yahvé desde su nacimiento en el vientre de la matriarca Rivka. Lo importante que esto revela es la presencia de “un continuo”. La condición de Dios es que no está sujeto a ninguna ley ¡Ni de la naturaleza, ni de los jueces!… Hay algo superior en la visión de Yahvé-Dios que hace que, al fin y al cabo, Dios elija al que ÉL quiera elegir y esa elección no depende de la naturaleza. Hay dos episodios estelares en la vida de Jacob: el primero es cuando sueña con una escalera de la cual suben y descienden ángeles. Esto representa una especie de contrapartida/adverso con la Torre de Babel. Lo totalmente distinto, pues Babel representaba la soberbia, el querer llegar al cielo y aquí son ángeles que bajan enviados por el creador. Frente a toda la prepotencia humana, hay en Jacob una humildad maravillada ante esta escalera donde suben y bajan mensajeros. El mensaje quizá no lo sabemos, pero al despertarse se reitera la promesa hecha a Abraham. ¡Qué temible es este lugar: es la Casa de Dios ! (Temor es aborrecer el mal). El segundo momento estelar de Jacob en los textos bíblicos es cuando Jacob va de regreso a su tierra tras haber trabajado durante más de una década en la tierra de Labán, su suegro, -ha tenido 13 hijos, de los cuales 12 fueron hombres y una mujer, Dinah-, y es al pasar el río, -donde les pide que lo esperen sus mujeres, hijos y ganado-, que lucha durante toda la noche con un “hombre” muy poderoso, que era en verdad un ángel de Dios. Esta lucha representa la simbología del hombre que necesita vencer sus pasiones y sus deseos terrenales para tener una condición más elevada. Una vez vencido el Ángel, le dice: “Ahora te llamarás ‘Israel’”, nace la identidad de este pueblo específico. Esta es la culminación de un Jacob que se fue educando para ser Israel, fue dominando sus impulsos, sus furias, adquirió sabiduría, y se vuelve quizá el patriarca más importante. La identidad del pueblo hebreo es el descubrimiento de la intimidad. “En ese lugar, un ser desconocido lo incita a luchar, Jacob lucha y no se deja caer, a lo que el desconocido le pregunta por su nombre, me llamo Jacob, lo que el desconocido replica, ya no será más tu nombre”. La identidad del pueblo judío como una especie de árbol genealógico y es la manera como el pueblo elegido es uno, y el resto de Israel somos todos los demás. Y el Mesías vendrá para el pueblo elegido y el resto de Israel. Aquí se fundamenta la genealogía cristiana a partir de su origen semita. La palabra judío viene por “el reino de Judá”. En la lucha con el Ángel, Jacob es lastimado en el tendón de la pierna, por eso, hasta hoy, los hijos de Israel no comen el tendón de la cadera que está en la coyuntura del muslo, ya que el ángel tocó la coyuntura del muslo de Jacob en el tendón de la cadera. Génesis 32:24-32 PDT: Jacob se quedó solo y entonces un hombre luchó con él hasta el amanecer. Cuando el hombre se dio cuenta de que no podía derrotar a Jacob, lo golpeó en la unión de la pierna con la cadera, y esa parte se le dislocó. Luego el hombre le dijo: —Déjame ir, que ya está amaneciendo. Pero Jacob dijo: —No te dejaré ir a menos que me des tu bendición. El hombre le pregunto: —¿Cómo te llamas? Y Jacob respondió: —Jacob. Después el hombre dijo: —De ahora en adelante no te llamarás Jacob sino Israel, ya que has luchado contra Dios y contra seres humanos, y has ganado. Entonces Jacob preguntó: —Por favor dime cómo te llamas. Pero el hombre le preguntó: —¿Por qué me preguntas cómo me llamo? Y en ese momento el hombre bendijo a Jacob. Jacob llamó a ese sitio Penuel y dijo: “Aquí vi a Dios cara a cara y sin embargo, aun estoy vivo”. Jacob estaba cojeando debido a su cadera dislocada y, mientras pasaba por Penuel amaneció. Entonces, hoy en día el pueblo de Israel no come el tendón que está en la unión de la cadera, porque Jacob fue golpeado en esa parte. Es muy importante destacar aquí a Plotino, quien afirma que existe una realidad que funda cualquier otra existencia: lo UNO. El principio básico es solamente UNO. Lo uno de la teoría de Plotino es indescriptible, ya que es la unidad, lo más grande, hasta tal punto que a veces le denomina el propio autor como Dios único infinito. Plotino era un místico. Se trata entonces de la unidad que funda la existencia de todas las cosas: ese el centro de su doctrina el UNO está más allá del ser y por lo tanto no hay ninguna definición que lo describa. De la formación de la humanidad toda, a la identidad de un pueblo específico y exclusivo. Toda cultura tiene una identidad que va formando lentamente en base a sus hábitos y costumbres. Esta es una de las mas importantes escenas del Viejo Testamento, la cual seguramente fue incluida en un altar por judíos crípticos para poder adorar al Dios de Israel dentro del contexto de un altar cristiano. Colofón La identidad del pueblo judío dentro de su árbol genealógico, y es así la manera, como será considerado el pueblo elegido, y el resto de Israel seremos todos los demás. Y el Mesías vendrá para el pueblo elegido y el resto de Israel. Aquí se fundamenta la genealogía cristiana a partir de su origen semita. La palabra judío viene por “el reino de Judá”. Instagram: @rodrigoriverolake y @galeriarrl Website: rodrigoriverolake.com Texto: Rodrigo Rivero Lake Imágenes: F.P. Derechos Reservados 2024
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